MOVIMIENTO EVITA
Solidaridad en barrios populares: El Movimiento Evita trabajando por la salud y la educación
El organismo social recorrió los barrios más postergados de la localidad bonaerense de Tandil.En el contexto actual de pandemia, donde todo es más difícil por las restricciones sanitarias y la crisis económica agravada, hay barrios y localidades de nuestro país donde la ayuda se hace imperiosamente necesaria. Eso que el Movimiento Evita continúa trabajando día a día para poder llevar la asistencia a las zonas más alejadas y postergadas de la Argentina.
La localidad bonaerense de Tandil recibió a los voluntarios del Movimiento Evita que se acercaron con sus brazos abiertos para brindar escucha, contención y acompañamiento en este difícil momento, donde las políticas públicas son primordiales y los pobres no pueden esperar.
En este sentido, Marilén Pogorzelski, secretaria de la agrupación, afirmó -en diálogo con el diario “El Eco de Tandil”- que el foco de estas jornadas está centrado en la educación, la salud, la asistencia alimentaria y las políticas de género.
Hay lugares a donde el Estado no llega y no es un trabajo fácil atender las carencias. El desempleo y la caída de la actividad económica impactaron mucho y más en los sectores vulnerables.
Con respecto a las campañas sanitarias, la dirigente social señaló que una de las consultas más realizadas por los vecinos tiene que ver con la vacunación contra el coronavirus, el cómo anotarse y qué sucede si un familiar contrae la enfermedad.
“A veces hay mucha desinformación. Nosotros nos metimos de lleno en eso y gracias al gran trabajo de las promotoras barriales se avanzó mucho.
Por último, el Movimiento Evita resaltó la importancia del apoyo escolar, ya que por la cuarentena, la pandemia y las desigualdades sociales, muchos niños no pudieron religarse con las escuelas y sus docentes. Por este motivo, el organismo social se involucró en la generación de la asistencia para la enseñanza orientada a los niños.
“Es importante esto, porque hay muchos chicos que no tienen acceso a internet, las escuelas entregan el material y los cuadernillos, y a veces se les complica para hacer las cosas solos, no reciben ayuda de nadie y no pueden pagar una maestra particular”, remarcó Pogorzelski; quien, además, reafirmó su compromiso para continuar trabajando con el objetivo de mejorar la calidad de vida de la población en los lugares más alejados y postergados del país.