María Becerra: cuál es el extraño síndrome que logró superar

No caben dudas que el 2023 es el mejor año en la carrera de María Becerra. Con solo 23 años no solo es la argentina más escuchada en Spotify, sino que consiguió que uno de sus temas integre las canciones de la décima película de la saga "Rápido y furioso". Pero eso no es todo, sino que logró vender, en una hora y media, las 80 mil entradas para su próximo recital en River Plate.

Así es que María Becerra se convirtió en la primera artista femenina de este país en llenar ese mítico estadio, al mismo nivel que Taylor Swift, Madonna, Tina Turner Lady Gaga y Miley Cyrus, rompiendo todos los récords para una cantante local.

Si bien la carrera de la intérprete viene creciendo a pasos agigantados, ella tuvo que lidiar con varias situaciones que tuvo que vencer para transformarse en la artista que es hoy. Tal es así que su carrera pareciera no tener techo.

Entre las distintas cosas que tuvo que enfrentar, supo que contar que sufría trastorno por déficit de atención e hiperactividad. Pero eso no es todo, sino que el año pasado confesó que también padece una alteración psicológica casi desconocida, llamada "Síndrome del Impostor".

El sitio especializado en psicología, "Michael Page", indica que "el síndrome del impostor, a veces llamado síndrome del fraude, es un trastorno psicológico en el cual las personas exitosas son incapaces de asimilar sus logros". Es más, explica que "quienes tienen muchos logros y triunfos suelen sufrir; así que esta enfermedad no se compara con la baja autoestima o falta de confianza".

Tal es así que la compositora indicó que "tuve unos momentos muy, muy bajos". Sin embargo, "ahora me siento increíblemente bien, muy segura de mí misma", aunque "antes me pasaba que tenía esto del Síndrome del Impostor, cuando no te crees merecedor de lo que tienes, de lo que te pasa”.  A la vez, explicó que antes creía que no estaba preparada. 

Sin embargo, entendió que "estaba muy así porque vivía consumiendo opiniones ajenas en redes sociales y los hacía muy parte mía”. Es más, reconoció que "hay cosas que lees y que no se pueden creer. Y te sorprende, hasta que entendés que no es personal". Por lo cual, señala que "hay gente que descarga sus frustraciones en algunos lugares, otros que les gusta criticar, les gusta hablar de la vida ajena”.

Por lo cual, María Becerra admite que entra lo menos posible a sus redes sociales, aunque aprendió a detectar que es mejor no hacerlo cuando está irritable, sobre todo porque "recibí críticas muy dur*s a lo largo de mi corta carrera".  Tal es así que "siento que me tienen de punto". Aún así, merced a mucho trabajo, logró superar esta situación.