Aníbal Lotocki
La esposa de Aníbal Lotocki habló del hermano de Silvina Luna: "Yo sé lo que es"
María José Favarón rompió el silencio.
En un contexto marcado por la constante atención de los medios de comunicación, Aníbal Lotocki y su esposa, María José Favarón continúan enfrentando una serie de acusaciones relacionadas con presunta mala praxis médica, que se han intensificado después de la trágica muerte de Mariano Caprarola y Silvina Luna.
Las causas que mantienen en vilo a Aníbal Lotocki y María José Favarón se remontan a años atrás, cuando se presentaron denuncias relacionadas con procedimientos médicos realizados por el cirujano. Si bien Lotocki ha negado rotundamente cualquier negligencia médica, el trágico deceso de sus pacientes ha avivado las llamas de la controversia.
María José Favarón, quien ha permanecido en gran parte en silencio ante la atención mediática y las acusaciones que envuelven a su esposo, decidió finalmente romper el silencio. En una entrevista exclusiva con "Socios del Espectáculo", declaró que es "muy injusto" el modo en el que los medios de comunicación han expuesto a Aníbal, subrayando que él siempre estuvo abierto al diálogo y dispuesto a aclarar estos asuntos en la justicia. "Aníbal siempre quiso hacer lo que la ley dice", expresó con firmeza.
Más adelante, María José compartió sus sentimientos de pesar por la muerte de Silvina Luna, quien fue una de las pacientes del médico hace algunos años atrás. En esta línea, quiso dejar en claro que también comparte el dolor con todos los allegados y el público por la pérdida de la modelo.
Además, Favarón hizo mención a Ezequiel Luna, hermano de Silvina, a quien no conoce personalmente pero expresó sus intenciones de sentarse a conversar con él. "Yo sé lo que es perder una hermana", confesó.
El caso de Aníbal Lotocki y las acusaciones de mala praxis médica continuarán siendo objeto de atención pública y escrutinio legal en los próximos meses. Mientras tanto, la pareja se encuentra en el ojo de la tormenta, lidiando con la presión mediática y la necesidad de demostrar la inocencia del cirujano en los tribunales.
