Harry y Guillermo ante una difícil imposición

El próximo 1 de julio, la princesa Diana de Gales hubiera cumplido 60 años. Para homenajearla se inaugurará una estatua en su honor evento que volverá a enfrentar cara a cara a sus hijos: los príncipes Guillermo y Harry.

Sin embargo, por las restricciones respecto a la pandemia generada por la aparición del coronavirus, que aún limitan los invitados a eventos al aire libre, Harry y Guillermo, debieron acatar una difícil imposición: reducir su lista de los invitados con los que hubieran querido contar.

Los jardines del Palacio de Kensington, residencia donde se alojan varios miembros de la familia real británica, ha sido el sitio elegido para inaugurar la estatua de Lady Di, por lo que ya luce adornado para la ocasión. Por eso, Harry y Guillermo, habían planeado la presencia de un centenar de amigos, exempleados y simpatizantes de Diana.

Igualmente, se ha informado que se fijará una nueva fecha para septiembre, para los amigos más cercanos y queridos de la princesa de Gales.

Fuente: (¡HOLA! TV)

Cabe destacar que desde que se planificó la inauguración de la estatua en honor de la madre de Guillermo y Harry, este último el autor de la carta más conmovedora sobre la pérdida de Diana, han pasado cuatro años. La obra fue hecha por el mismo autor del retrato de Isabell II que aparece en las monedas de país: Ian Rank Broadley.

Si bien estaba lista en 2018, se decidió esperar a otro momento para no distraer la atención de la boda real de los duques de Sussex.

El nuevo encuentro entre Guillermo y Harry, se da en el contexto del reciente nacimiento de la hija del segundo con Meghan Markle, Lilibet Diana, nombre compuesto en honor a la reina y a Lady Di. La última vez que los hermanos habían coincidido fue en el funeral de su abuelo, el duque de Edimburgo, en el mes de abril.

Distanciados por las explosivas declaraciones de los duques de Sussex sobre la familia real británica, hay una gran expectativa para ver cómo se comportan, ya que además, no participarán sus esposas ya que Meghan Markle dio a luz hace tres semanas y Kate Middleton no podrá asistir por las restricciones del COVID-19.