Cuando el segundo hijo llega a la vida de una familia siempre es motivo de alegría, pero también de cambios y aprendizaje. La vida ya no es igual pero sí es mejor. 

En esta nota vas a encontrar algunas ideas que podes implementar para que no inunde el caos o los miedos y si surja una oportunidad para que todos los integrantes aguarden con alegría al nuevo bebé.

“El amor no se divide. Se multiplica”. 

Frases que suenan esperanzadoras, pero llevan un fondo de preocupación ante el hijo mayor, que deberá adaptarse a la nueva organización además como se siente con su nuevo rol y cuáles son sus expectativas. 

Alrededor una familia entera aguarda al nuevo bebé entonces surgen cientos de preguntas. ¿Cómo se siente? ¿Qué hago para que no se sienta desplazado? ¿Es posible criar a dos niños que se sientan amados por igual? 

Para responder esto es fundamental que el primogénito se sienta parte de la nueva dinámica familiar, y eso se inicia a partir desde el momento de la noticia, y continua en el avance del embarazo, parto y crianza en el hogar siendo una familia de cuatro. 

Si bien la buena nueva puede ser muy deseada y causar felicidad en los niños, eso puede modificarse en el tiempo donde surjan celos o molestias, incluso algunos cambios en su personalidad.  

Ser conscientes de que el crecimiento de la familia llegará con cambios es lo primero que tenemos que tener en cuenta para acompañar las etapas venideras. Si se siente parte entonces generará expectativas y sentimientos positivos. 

• Escuchar sus inquietudes. 
• Comprender sus sentimientos. 
• Explicar que está sucediendo.  

Ante su llegada definir que, así como los padres del nuevo bebé, es el hermano mayor quien debe conocer a su hermanito. Una moda que surgió en los últimos tiempos es que sea el bebé quién le traiga un regalito al más grande. Podemos adaptar también esta idea a un intercambio de regalos. Pero no es condición, pueden ser simbólicos. Lo importante es hacerlo parte, escucharlo, preguntarle y no agobiarlo en un momento de tantos cambios con la llegada del segundo hijo. 

¿Qué pasa si su reacción es negativa? 

Las emociones en este momento son un abanico, puede ser un entusiasmo desmedido, así como un rechazo profundo a la nueva presencia, incluso desde el embarazo.  

Es un momento especial para todos, una madre que transita física y emocionalmente el embarazo, un padre que acompañe y colabore en estas circunstancias y un hermano mayor que se adapta a una realidad que, por el momento, le resulta desconocida.  

Maneras de prepararnos para ser una familia de cuatro integrantes.

¿Cómo ayudar a nuestro hijo con la llegada del hermanito? | Videos Planetamamá. Fuente: (Planeta Mamá- Youtube)

Teniendo en cuenta la edad del hermano mayor podremos plantear estrategias.  

• Participar de las consultas al médico. 
• Poder armar juntos el espacio en el hogar dónde llegara el bebé.  
• Planear un regalo que prepare el hermano mayor, así como también uno que traiga el nuevo integrante. 
• Busque cuentos, libros, videos donde se observe esta nueva dinámica para anticiparle cómo será.  
• Poder planificar momentos a solas con el primogénito que se puedan mantener en el tiempo, donde tenga exclusividad.  
• Charlar sobre lo que significa positivamente ser “hermano mayor”.  
• En la crianza, que pueda participar de tareas sencillas para ayudar cómo durante el cambio de pañal o momento del baño. 

Siempre se puede consultar con el pediatra sobre que pasos seguir para acompañar estos cambios en la familia pero teniendo en cuenta que un enfoque positivo de los cambios además de escuchar y hacer parte al niño ayudará a que esta etapa, que por momentos puede ser un caos, sea un etapa feliz.