Cómo está hoy Miranda, la hija de Érica Rivas

En 1999, mientras Érica Rivas formaba parte del elenco de "Campeones de la vida", la exitosa telenovela protagonizada por Soledad Silveyra y Osvaldo Laport, conoció a Rodrigo de la Serna. Un actor que recién estaba iniciando su carrera y de quien se enamoró perdidamente, aunque antes debieron finalizar con las parejas que tenían hasta aquél momento.

"El que estaba mu**o de amor era yo", supo contar él. "Cuando no había motivos para estar cerca, me los inventaba", continuó, hasta que por fin le declaró su amor a Érica Rivas, quien no tardó en decirle que a ella le pasaba lo mismo.

En enero de 2001, fruto de ese amor nació Miranda y convirtió a la actriz en su feliz mamá. Una década después de haberse conocido, la pareja se disolvió. "Vivimos 11 años juntos y constituimos una familia preciosa", señaló el actor. Sin embargo, pese a la separación, ambos estuvieron muy pendientes de la crianza de su hija.

Las carreras de ambos fueron consolidándose, aunque ella fue encasillada como María Elena Fuseneco el icónico personaje que realizó en "Casados con hijos", con el cual aun la identifican. Es más, sus fans clamaron por ella en la versión teatral de la obra, aunque ella no formó parte de ese elenco.

Por su parte, Miranda fue "haciéndose un nombre propio en el mundo del espectáculo", según lo contaron en Estilo y Tendencia. Tal es así que, a los 22 años, lleva la actuación en sus venas, convirtiéndose en la más digna heredera de sus padres. "Es un privilegio ser hija de dos personas increíbles, que además son dos actorazos", supo explicar en una entrevista que concediera a La Nación.

En agosto del año pasado, recibió el "Premio Sur", en la categoría "Revelación". El jurado aclamó trabajo actoral en el film "Errante corazón", donde compartió cartel con Leonardo Sbaraglia. Asimismo, protagonizó "Bodas de s*ngre", en el Teatro San Martín junto a María Onetto, y fue parte de la serie internacional "Now & Then".

Como si eso fuese poco, se dio el gusto de personificar a su madre, durante su adolescencia en la película "Elena sabe". Fue elegida porque es casi un clon de Érica Rivas, sus mismos rasgos, aunque los ojos claros del de su papá. Tal como lo dijo Miranda, "es un privilegio hacer lo mismo que ellos".