Carmen Barbieri confesó que quería acabar con su vida: "Estaba totalmente paralizada"

Si bien por estos días está pasando uno de sus mejores momentos, al frente de "Mañanísima", el programa que conduce por El Trece, la vida de Carmen Barbieri no siempre fue color de rosa. A lo largo de sus 68 años, tuvo que soportar distintas situaciones complicadas, sobre todo en relación a su salud.

Si bien en los últimos tiempos se conocieron distintas dolencias, sobre todo de tipo traumatológicas, que tuvieron a Carmen Barbieri como protagonista e incluso la alejaron de sus lugares de trabajo. Aun así, siempre puso lo mejor de si para salir adelante y no dejarse vencer por los obstáculos que iban apareciendo en su camino.

Sin embargo, hubo un hecho que puede considerarse casi bisagra y que puso en serio peligro la vida de la exvedete. Ocurrió durante la pandemia, cuando fue conectada a un respirador. Precisamente, de este tema conversó con "Ciudad", confesando que hasta llegó a pedir que la desconectaran para terminar con su sufrimiento. 

“Estuve al borde de la muerte dos o tres veces, pero la última vez, la del Covid 19, fue durísima", comentó la conductora. Para más estupor, ella no recordaba que haberse contagiado de coronavirus y creía que había tenido un ACV. Al respecto, mencionó que, cuando le bajaron los sedantes, "no podía moverme, estaba totalmente paralítica". 

Es más, recuerda que "estaba intubada y atada porque me había arrancado todos los cables". Entones, "respiraba gracias a ese aparato, que hacía un ruido infernal". Sin embargo, en sus momentos de lucidez solo pensaba en su hijo. "Pobre Fede, lo voy a dejar solo", era su pensamiento.

Frente a ello, la actriz le hacía gestos a Fede Bal para que la desconectara. Cuando él le preguntó si era eso lo quería, no dudó en afirmar que era su voluntad, mientras para sus adentros pensaba: "que te den a tu mamá hecha un cacho de carne que no se movía, cómo ibas a hacer para atenderme". En ese momento crítico, la conductora se consoló con una certeza: "lo dejo hecho un hombre, él se las va a saber arreglar".

Tal es así que no tiene temor a confesar que "cuando vi que el cuerpo no me respondía" hacía el gesto de pedir que la desconecten y acabar con su vida. "Vos estás loca”, le dijo su hijo.

Sin embargo, Carmen Barbieri está segura que no estaba loca, sino que "me parece que era lo más normal irme dignamente", agregando: "yo creo en la eut*nasia". Finalmente, la vida le dio otra oportunidad, y hoy tiene la chance de contar todo solo como un terrible recuerdo.