El Chaltén, Santa Cruz: el pueblo más joven de Argentina y la meca del trekking en el sur

El Chaltén es un pequeño pueblo ubicado en el extremo sur de la provincia de Santa Cruz, en la Patagonia argentina. Su nombre significa “montaña humeante” en tehuelche, y hace referencia al cerro Fitz Roy, que suele estar cubierto de nubes.

El Chaltén tiene la particularidad de ser el pueblo más joven de Argentina, ya que fue fundado en 1985 como parte de una disputa fronteriza con Chile. Desde entonces, ha crecido y se ha convertido en un destino turístico muy popular entre los amantes de la naturaleza y el deporte.

Y es que El Chaltén es la meca del trekking en el sur del país, ya que ofrece una gran variedad de senderos que recorren paisajes espectaculares, como lagos, bosques, glaciares y montañas. Algunos de los recorridos más famosos son:

• El sendero al Fitz Roy: es el más emblemático y el más exigente, ya que tiene una duración de unas 8 horas y un desnivel de 800 metros. El premio es llegar a la laguna de los Tres, desde donde se puede contemplar la imponente silueta del Fitz Roy y sus agujas de granito.
• El sendero al cerro Torre: es más fácil y corto que el anterior, ya que se puede hacer en unas 6 horas y tiene un desnivel de 250 metros. El atractivo es llegar a la laguna Torre, donde se puede ver el cerro Torre y su glaciar colgante, así como los témpanos que flotan en el agua.
• El sendero a la laguna Capri: es una opción ideal para los que quieren hacer una caminata más tranquila y disfrutar de las vistas del Fitz Roy desde otro ángulo. Se puede hacer en unas 4 horas y tiene un desnivel de 350 metros. La laguna Capri es un lugar perfecto para hacer un picnic o acampar.
• El sendero al glaciar Huemul: es una alternativa para los que quieren ver un glaciar de cerca y sin mucha dificultad. Se puede hacer en unas 3 horas y tiene un desnivel de 150 metros. El glaciar Huemul es uno de los pocos que se puede acceder sin necesidad de cruzar un lago o un río.

Además del trekking, El Chaltén ofrece otras actividades al aire libre, como escalada, rafting, kayak, pesca o avistamiento de aves. También cuenta con una oferta gastronómica y cultural variada, donde se pueden degustar platos típicos como el cordero patagónico o la trucha, y visitar museos o ferias artesanales.

El Chaltén es un pueblo que enamora a todos los que lo visitan por su belleza natural y su ambiente acogedor. Es un lugar ideal para desconectar del estrés y conectar con uno mismo y con la naturaleza.