Mauro Icardi: engañado

Mauro Icardi es permanentemente mencionado como símbolo del engaño. Incluso su nombre fue transformado en un verbo con una connotación especial: "icardear". Por ello, llama poderosamente la atención que el objetivo de esta acción haya sido él.

Por estos días, Mauro Icardi se encuentra de vacaciones de su equipo de fútbol, aunque el PSG decidió declararlo transferible y estaría preocupado por cuál sería su futuro profesional. Sin embargo, preferiría dejar de lado esta delicada situación laboral y enfocarse en su familia, y en los días que están pasando juntos en Italia.

El futbolista, junto a su esposa Wanda Nara, decidió colaborar con su cuñada Zaira Nara, quien se encuentra en plena etapa de reconciliación con su esposo Jakob Von Plessen, y ayudarla con respecto al cuidado de sus hijos Malaika y Viggo para que ellos puedan compartir unos días de descanso en Grecia, solos.

Por lo tanto, ambas familias se reunieron en Italia, hacia donde Wanda viajó con sus pequeños y su madre. La idea era festejar el cumpleaños de Jakob y luego quedar a cargo de los retoños de su hermana, para que ella con su marido pudieran tener un necesario viaje romántico que reconecte a la pareja.

En ese entorno, el futbolista colabora con el cuidado de sus sobrinos y van juntos a todas partes, como una granja y otros lugares donde los primos se divirtieron. Es más, Francesca e Isabella Icardi con la complicidad de Malaika le jugaron una broma al deportista y terminaron engañándolo.

Sí, la picardía de las pequeñas lo convirtieron en blanco de sus travesuras. La cuestión es que todos estaban pasando un día de pileta, cuando ellas vieron a Icardi acercarse a la piscina, entonces, entre muchas risas, decidieron empujarlo y tirarlo al agua.

Así fue que el jugador terminó empapado y las primas corriendo hacia Wanda, que estaba grabando todo el momento y luego terminó subiéndolo a sus redes sociales, para compartirla con sus más de 13 millones de seguidores.

Mauro Icardi se convirtió en víctima de un engaño, infantil claro, pero engaño al fin. Por supuesto que todo fue una broma y parte del juego de sus hijas y sobrina.