Natalia Oreiro dio detalles de su realidad en casa: "No me dejan"

En un mundo donde las relaciones amorosas a menudo son efímeras, Natalia Oreiro y Ricardo Mollo se destacan como un ejemplo de amor duradero y auténtico. La pareja, que ha compartido sus vidas durante más de dos décadas, está al borde de celebrar un hito importante en su relación: ¡22 años juntos!

Con la misma delicadeza y sinceridad que ha caracterizado su carrera artística, Natalia Oreiro compartió hace poco su visión sobre su relación con el líder de la banda de rock Divididos, Ricardo Mollo. "No hay fórmulas", afirmó con humildad, destacando que su amor no se basa en recetas preestablecidas, sino en la autenticidad y una sorprendente similitud de gustos que ha motorizado su amor a lo largo de los años.

La uruguaya, quien se destacó en la miniserie "Santa Evita" de Star+, en la que interpretó el icónico papel de Evita Perón, reflexiona sobre su relación, que ha sobrevivido a casi la mitad de sus vidas. "Tenemos muchos gustos parecidos", admite, sugiriendo que esta afinidad es un pilar fundamental en su relación. Sin embargo, también reconoce que en muchas cosas son diferentes, pero lo que realmente importa es que "tenemos los mismos valores y la pasamos bien juntos". Oreiro subraya que esta armonía en valores es un elemento crucial que los hace elegirse mutuamente día tras día.

Además de su sólida relación, Natalia disfruta de su vida en familia, que incluye a sus queridas mascotas. Sin embargo, develó hace apenas algunos minutos que la relación con sus peludos compañeros suele ser bastante peculiar.

"No me dejan hacer una historia de flores romántica y tranquila", confiesa entre risas. Resulta que sus adorables perros estaban más interesados en jugar con su "mamá" que en permitirle capturar en video la belleza de la naturaleza circundante. Sin embargo, la esposa del cantante puede encontrar consuelo en que, después de todo, sus queridas mascotas también forman parte de la naturaleza, lo que agrega un toque especial a esa historia de Instagram.

Natalia Oreiro y Ricardo Mollo siguen siendo un ejemplo de amor sólido y duradero en la industria del entretenimiento, evidenciando que, a pesar de las adversidades y las diferencias, la autenticidad y los valores compartidos son la clave para mantener vivo el amor, y volcar todo aquello en la crianza de su hijo, Atahualpa.